El Síndrome Premenstrual fue considerado por muchos años como algo normal entre las mujeres. La menstruación “tenía que doler” y por lo mismo, millones de mujeres se resignaron a sufrir sus síntomas. Actualmente y gracias a avances en la medicina, este síndrome que hoy afecta al 40% de las mujeres en el mundo, puede ser diagnosticado y tratado.
El Síndrome Premenstrual (SPM) o como lo denominan algunos médicos, el Síndrome de Tensión Premenstrual, es el conjunto de signos y síntomas que aparecen durante la segunda mitad del ciclo menstrual, posterior a la ovulación. Generalmente, éste se manifiesta un par de días antes de la menstruación, y se extiende hasta algunos días posteriores a ella, de manera recurrente.
Según el Dr. Jorge Avilés, gineco-obstetra de Integramédica, el SPM afecta a entre un 35% y 40% de las mujeres en el mundo siendo la latinoamericana un poquito “más sufrida”, principalmente porque considera normal tener problemas de menstruación y no le llama la atención. Esa mujer piensa: “A mi mamá y a mi abuela también les pasaba, hoy a mis hermanas y a mí también; por lo tanto, no tiene nada de extraño ni de malo”. En el fondo, no hay conciencia en la población de que éste es un síndrome. Se entiende que la menstruación “tiene” que doler.
Durante muchos años, la comunidad médica utilizó diversos sistemas para medir y determinar si una mujer padecía o no de este síndrome. No obstante y gracias a los acuerdos obtenidos el 2008 en un encuentro mundial de especialistas en la materia, se realizó el Primer Consenso Latinoamericano sobre Diagnóstico y Tratamiento del SPM. En esa ocasión se determinaron cuáles serían sus síntomas lo cual le facilitaría a las mujeres identificar si es que tienen este síndrome.
Cómo identificar si hay un SPM
Existen diferentes grados de SPM. Están los leves y moderados -donde las mujeres sienten claros signos como tensión mamaria, dolor de cabeza o irritabilidad-, hasta los síndromes más severos, cuya máxima expresión de gravedad es el Trastorno Disfórico Premenstrual (TDPM). El Dr. Lee Schulman, experto norteamericano en el tema que participó en este Consenso, indicó que el TDPM es “una versión exacerbada del SPM no muy común, pero que cuando afecta a una mujer, lo hace intensamente. Quien padece de TDPM días antes de su menstruación, tiene sentimientos suicidas, se encierra en su casa sin ganas de trabajar, salir o relacionarse con otras personas. Días después de su período, vuelve a ser la misma de siempre”.
Tanto para el Dr. Avilés como para el Dr. Schulmann, la clave para diagnosticar un SPM, es ver cuándo ocurren los síntomas. Si estos ocurren antes de la menstruación, quiere decir que son efectivamente premenstruales. Si estos efectos se generan durante todo el mes, entonces puede ser un indicador de otros tipos de problemas.
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Para el doctor Avilés, el protocolo para determinar si existe un SPM indica que la mujer debe presentar al menos un síntoma de la esfera emocional, asociado a cuatro de los físicos. Estos deben aparecer en la fase lútea1 de la menstruación y desaparecer, como máximo, un par de días después que ésta haya culminado. “Yo nunca he visto una paciente que tenga sólo un síntoma pre-menstrual. Es muy raro. Generalmente no saben que tienen otros síntomas, pero al preguntarles, los identifican”.
La causa
El origen de este síndrome no está claro. El Dr. Avilés afirmó que no existe una razón para establecer cuál es la causa de por qué se presenta el SPM. “Lo que sabemos hasta el momento, es que este tipo de pacientes tienen niveles hormonales cíclicos normales, pero asociado a ello, presentan una alteración a nivel central de la recaptación de la serotonina. Esta relación es la que determina que se desencadenen una serie de procesos en el organismo que pueden provocar síntomas como irritabilidad, edema (hinchazón provocada por la retención de líquido), mastodinia (tensión o sensibilidad mamaria), etc.
Tratamientos
Durante décadas los anticonceptivos se han utilizado primordialmente para prevenir los embarazos. Sin embargo, el Dr. Schulmann explica que durante los últimos 5 años existen diversos e importantes beneficios no ligados a la anticoncepción, siendo uno de ellos el tratamiento del SPM. Este beneficio paralelo está dado por la presencia de drospirenona, una progestina sintética que ayuda a disminuir los síntomas.
No olvide consultar a su médico.